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El menor Antonio Cortés Chávez, de 8 años de edad, vivió un peregrinar para poder ser atendido de lesiones en la garganta, luego de que en días pasados accidentalmente se metiera una flauta y por principio de cuentas, fue atendido por la Cruz Roja e internado en el Hospital Regional.
Según fuentes directas del hospital, las recomendaciones de los médicos del nosocomio fueron que el niño debería tomar solo alimentos blandos o líquidos, pero al parecer sus familiares no cumplieron con esa orden y el niño registró sangrado por la boca por las lesiones que había sufrido.
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