
Raúl Jiménez (9) celebra tras anotar su doblete y el quinto de México en la noche ante Cuba en su partido inaugural de la Copa Oro 2019. [Ben Nichols / Alamy Stock Photo]
El ambiente se siente eléctrico, ¿a poco no? La Copa Oro 2025 ha llegado a su clímax. De hecho, las semifinales de la Copa Oro 2025 prometen batallas inolvidables. Estos partidos definirán a los dos grandes finalistas. Además, su resultado tendrá eco en toda nuestra región. Los cuartos de final fueron de pura tensión. Vimos definiciones agónicas y mucho drama. Por lo tanto, la expectativa está por los cielos.
Estados Unidos llega como siempre, de favorito. Mi México lindo y querido carga con la presión del campeón. Honduras viene con una garra que asusta. Y Guatemala, bueno, lo de Guatemala es una historia de película. Son el caballo negro que nadie vio venir. Sobre todo, su presencia le pone una sabrosura increíble a estas semifinales de la Copa Oro 2025.
Claro está, algo ha quedado muy claro en este torneo. La competencia en la CONCACAF está más pareja que nunca. Tres de los cuatro partidos de cuartos fueron a penales. ¡Una locura! Honduras despachó a Panamá desde los once pasos. Guatemala hizo lo propio con una correosa Canadá. Estados Unidos sufrió de más contra Costa Rica. El único que resolvió en tiempo regular fue nuestro Tri. Aún así, le ganamos 2-0 a Arabia Saudita. Esto demuestra que cualquiera le puede ganar a cualquiera. Las semifinales de la Copa Oro 2025 serán un verdadero manjar.
El sueño chapín contra el gigante de las barras y estrellas
Vaya agarrón nos espera este miércoles en St. Louis. Estados Unidos se enfrenta a la sorpresiva Guatemala. Los EUA llegan con la etiqueta de favoritos. Dominaron su grupo con paso perfecto. Metieron goles a racimos y se veían muy sobrados. Sin embargo, Costa Rica les sacó un susto tremendo en cuartos. Tuvieron que ir hasta los penales para poder avanzar. Eso nos demuestra que no son invencibles. Sobre todo, les cuesta cuando se les presiona de verdad.
Por otro lado, tenemos a la Bicolor guatemalteca. ¡Qué historia la de los chapines! Se metieron a la fiesta grande como segundos de su grupo. Dejaron en el camino a Jamaica. Ya en cuartos, dieron la campanada contra Canadá. Se fajaron como los grandes y ganaron en penales. Parece que el espíritu de equipo puede mover montañas. Su jugador Rubio Rubín anda en plan grande. Él metió el gol que los tiene soñando.
La verdad, me quito el sombrero ante Guatemala. Están en las semifinales de la Copa Oro 2025 por primera vez desde 1996. Aún así, la tienen muy difícil. La historia no juega a su favor. Se han enfrentado tres veces a los gringos en este torneo. Las tres veces han perdido y sin meter ni un solo gol. Mi pronóstico, con todo el dolor de mi corazón por los hermanos chapines, es una victoria de Estados Unidos por 2 a 0.
El Tri y la obligación de ganar frente a la furia catracha
Ahora bien, vamos con el partido que nos importa, el de nuestro México. El Tri se mide a una Honduras peligrosa en Santa Clara, California. Nosotros llegamos como mandones de la zona. Somos los actuales campeones y tenemos nueve copas en la vitrina. Por lo tanto, la presión, como siempre, está a tope. No hay otro resultado aceptable que no sea la victoria. En cuartos, el equipo se vio bien contra Arabia Saudita. Alexis Vega anda enchufado y eso es una gran noticia. Ganamos 2-0 y controlamos el partido.
Aún así, no podemos confiarnos ni un segundo. Sobre todo, porque enfrente tendremos a Honduras. La “H” es un equipo con un carácter de acero. Empezaron la Copa Oro 2025 con una goleada espantosa contra Canadá. Parecía que estaban liquidados. Pero se levantaron de la lona de forma increíble. Ligaron dos victorias y se metieron a cuartos. Ahí, le jugaron de tú a tú a Panamá. Empataron de último minuto y ganaron en penales.
Esa capacidad de recuperación los hace muy peligrosos. Su delantero Anthony Lozano es un demonio. La defensa mexicana deberá tener mucho cuidado con él. Los duelos recientes contra ellos han sido muy parejos. Nos han ganado partidos importantes últimamente. Estas semifinales de la Copa Oro 2025 tienen sabor a revancha. Hay que demostrar quién manda en la CONCACAF. Mi pronóstico es un sufrido pero merecido 2 a 1 para el Tri.
La moneda de la CONCACAF está en el aire
Estos enfrentamientos van más allá de un simple boleto a la final. De hecho, lo que estamos viendo es un cambio en el poder de nuestra confederación. La clasificación de Guatemala es la prueba más clara. La garra de Honduras para llegar a estas semifinales de la Copa Oro 2025 también lo es. Ya no es un torneo de solo dos equipos. México y Estados Unidos siguen siendo los gigantes. Sin embargo, la distancia se está acortando a pasos agigantados.
Los equipos de Centroamérica y el Caribe han crecido muchísimo. Muestran más orden táctico y una mentalidad ganadora. La gran cantidad de tandas de penales lo confirma. Los partidos son más cerrados y se definen por detalles. Para mí, esto es lo mejor que le pudo pasar al torneo. Le añade un nivel de competencia y drama que antes no tenía. Este torneo nos ha dejado varias lecciones claras.
- La paridad en CONCACAF es una realidad.
- Ningún equipo, por más favorito que sea, la tiene fácil.
- Las selecciones centroamericanas han elevado su nivel.
- La mentalidad y el corazón son tan importantes como la táctica.
Claro está, la gran final se jugará el domingo en Houston, Texas. Todos soñamos con ver un clásico entre México y Estados Unidos. Sería una final espectacular. Pero, la posibilidad de ver a un “caballo negro” como Guatemala o Honduras en esa instancia es real. Eso sí que sería una sacudida para todo el continente.
La gloria espera al final del camino
Así las cosas, mi gente. Estamos ante unas semifinales de la Copa Oro 2025 que lo tienen todo. Por un lado, una historia de cenicienta que busca la hazaña imposible. Por el otro, un clásico de la zona con cuentas pendientes. Son partidos que representan la esencia pura del fútbol en nuestra región. Hay historia, rivalidad y el sueño de la gloria en cada jugada.
Más bien, el orgullo de naciones enteras está en juego. Más allá de quién gane o quién pierda, debemos disfrutar el momento. Estos encuentros prometen ser inolvidables. Dejarán una huella profunda en la historia de la Copa Oro 2025. El continente futbolístico se detiene para ver estos partidazos. Preparen la botana y la bebida de su preferencia. El miércoles por la noche, el fútbol será el único rey.